Ante la aparición de una publicación de los anteriores arrendatarios del conocido por todos
como “CAMPING” del Cantosal, en donde ponen de manifiesto su particular punto de vista
sobre los motivos del abandono de la actividad, esta Presidencia quiere aclarar algunas cosas
que considera importantes para que todos los vecinos de esta Comunidad de Villa y Tierra
comprendan y conozcan la evolución y el estado actual de ejecución de este proyecto.
En Junio de 2015 cuando la nueva corporación tomó posesión del cargo, se encontró con unas
obras iniciadas en el “camping” de forma precipitada y sin criterio alguno de viabilidad ni de
rentabilidad. Las obras contaban con una partida presupuestaria de unos 74.000,00 €, ridícula
a todas luces, de los que en el pleno de 13 de Mayo de 2015, la anterior Presidencia de la
Comunidad, desvió 15.200,00 € con destino al CEREBOSMA.
En Julio de 2015 el informe de la intervención de la Comunidad reflejó que el porcentaje del
presupuesto gastado por la anterior Corporación era cercano al 70% del presupuesto total a
falta todavía de 5 meses para acabar el año. Analizada la situación, el estado de las cuentas y
las obligaciones de pago pendientes, la única opción posible para garantizar una gestión
correcta de la Comunidad era paralizar las obras.
En 2016 y todavía arrastrando compromisos contraídos por la anterior corporación, se ejecutó
la obra que presupuestariamente se pudo, con todos los materiales que nos encontramos en
Junio de 2015 tirados en el pinar, por un valor superior a los 14.000,00 € que pagó la nueva
corporación, no la anterior.
A principios de ese mismo año y tras una reunión de trabajo con responsables de la Junta de
Castilla y León (por el tema que todos recordaran del cemento de los columpios y las
barbacoas viejas), se nos informó, para mayor despropósito, que la obra que se estaba
ejecutando no seguía el proyecto presentado en la Junta. Por ese motivo, hubo que efectuar
una modificación del mismo para que la Junta de Castilla y León, entidad gestora del monte,
autorizara la continuación de las obras.
Estos hechos y no otros, son los que impiden a la nueva Presidencia acometer las obras de las
que se queja el anterior adjudicatario.
Curiosamente, no cuenta el anterior adjudicatario en su publicación, las peticiones que esta
Presidencia ha tenido que acometer para resolver las numerosas deficiencias de las
instalaciones (bomba de agua de la piscina, mosquiteras en el bar, lavavajillas, instalaciones
eléctricas obsoletas y deficientes, etc.) y que si no se hubieran solucionado habrían hecho
inviable la actividad. No es responsabilidad de la actual Presidencia ni de la actual corporación,
si los adjudicatarios se sentían engañados o estafados por no contar con las infraestructuras y
los servicios que debían. Esa responsabilidad recaería en todo caso, en quién adjudicó las
instalaciones a estos señores.
Todos sentimos que estos señores se hayan tenido que ir, pero resulta evidente que la
responsabilidad del abandono no es de la actual Presidencia de la Comunidad de Villa y Tierra
que ha hecho todo lo que estaba en su mano para poner en valor ese espacio. La nefasta
gestión heredada, la total falta de previsión y las trabas presupuestarias, son las verdaderas
causantes de que haya resultado imposible hacer más en este proyecto.
Ahora estamos a la espera de la redacción de un nuevo Pliego de Condiciones por parte de la
Junta de Castilla y León para poder adjudicar de nuevo el “camping”, pliego que lleva solicitado
bastante tiempo. En cuanto sea redactado, se sacarán a licitación las instalaciones, con la
confianza de que tendrá adjudicatario y en mejores condiciones que los anteriores.
Desde la Comunidad de Villa y Tierra lamentamos enormemente la decisión de estos señores
de abandonar la explotación del “camping” pero es nuestra obligación anteponer los intereses
comunitarios y el rigor presupuestario a los intereses particulares de nadie.